JOYAS DE ORO
CUIDADOS
– Las joyas de oro no requieren cuidados especiales pero es conveniente seguir algunas normas sencillas.
– Guardar las joyas envueltas en un paño suave, separando unas de otras para evitar arañazos.
– No derramar jamás mercurio sobre el oro, dejará la joya blanca.
– Las joyas que contienen diamantes u otras piedras preciosas deben tratarse con especial cuidado, es recomendable hacer una revisión periodica del engaste de las piedras.
LIMPIEZA
La limpieza del oro es sencilla, basta con poner en un recipiente un poco de agua con jabón neutro. No obstante, lo mejor es que cada cierto tiempo nos traiga sus joyas para una limpieza más profesional ( ultrasonidos, pulido y en el caso de oro blanco un baño de rodio).
JOYAS CON DIAMANTES Y GEMAS
CUIDADOS
– Deben evitarse los golpes sobre superficies duras, y cambios de temperatura extremas. Los diamantes, al contrario de otras gemas, no se rayan pero pueden romperse.
-Es aconsejable hacer una revisión periódica del engaste de las piezas con las gemas, especialmente las pulseras y sortijas.
LIMPIEZA
El polvo, la contaminación y el uso diario restan el brillo característico de las gemas y diamantes.
– Entre cada limpieza profesional aconsejamos el uso ocasional de un producto de limpieza no abrasivo-solo para las joyas con diamantes-. Se puede aplicar una solución suave de seis partes de agua por una parte de amoniaco con un cepillo de cerdas suaves.
– Las joyas con otro tipo de piedras como corales, amatistas, zafiros, topacios etc necesitarán otros metodos de limpieza.
GEMAS CON PERLAS
CUIDADOS
– Las joyas de oro no requieren cuidados especiales pero es conveniente seguir algunas normas sencillas.
– Guardar las joyas envueltas en un paño suave, separando unas de otras para evitar arañazos.
– No derramar jamás mercurio sobre el oro, dejará la joya blanca.
– Las joyas que contienen diamantes u otras piedras preciosas deben tratarse con especial cuidado, es recomendable hacer una revisión periodica del engaste de las piedras
LIMPIEZA
La limpieza del oro es sencilla, basta con poner en un recipiente un poco de agua con jabón neutro. No obstante, lo mejor es que cada cierto tiempo nos traiga sus joyas para una limpieza más profesional ( ultrasonidos, pulido y en el caso de oro blanco un baño de rodio).